El retrato fue uno de los grandes detonadores para la rápida expansión de la fotografía. A su vez, los antecedentes de la pintura fueron cruciales para el invento presentado por Daguerre en 1839. En el arte, un retrato es la representación de la figura humana (principalmente el rostro), de manera tridimensional, cuando es una escultura, o en dos dimensiones, si es dibujo, pintura o fotografía.
El retrato fotográfico es el fragmento de vida escogido por el fotógrafo para comunicar una impresión, un acontecimiento, mostrar un sentimiento o una actitud; ir desde la imagen de una persona a nivel físico a la imagen sobre el carácter o la vida del retratado. El impacto de la fotografía en el retrato ha significado un conjunto de cambios cruciales que van desde la obsesión por capturar temperamento y carácter en una imagen hasta el impulso de la celebridad por medio de los fenómenos visuales de masas.
El retrato parece uno de los tipos de fotografía más fáciles, pero lograr transmitir tanto con tan poco requiere de algo de práctica, y por tanto, el empleo de un conjunto de consejos tales como: captar la personalidad, enfocar a los ojos, fijarnos en otros detalles del cuerpo que pueden ser interesantes y aportar un toque de originalidad, elegir el fondo adecuado, jugaron la luz, etc. Particularmente en la sesión de fotos presentada a continuación (donde se eligieron 5 fotos en total) se tomó en consideración la iluminación dado que la luz y las sombras pueden acentuar el estado de ánimo del retratado, potenciar o desviar la atención de determinadas zonas de su cuerpo, ocultar defectos, etc. Así mismo, se realizaron los retratos con fondo blanco y negro, sabiendo que la persona a fotografiar es el auténtico protagonista de la foto, y en función del fondo que le acompañe, el resultado final transmitirá una sensación u otra.
Realizadas por:
Yetsenia De Gouveia
Carlos Rodriguez
León Grimau
Noymar Luque
No hay comentarios:
Publicar un comentario